“ … cuanto más rápido pedaleo, más rápido podre retirarme.”
Lance Armstrong
La verdad, es que sí que pedaleo, más rápido que nadie y por ello fue considerado como uno de los mejores ciclistas de todos los tiempos, hasta tal extremo de ser convertido en una leyenda de este bello deporte que es el ciclismo y por eso se retiró a tiempo tal y como predijo, en la cúspide de su carrera profesional.
Llego a ser todo un referente profesional, deportivo y humano, un tipo duro, un americano sobrenatural, un fuera de serie … un ciclista ejemplar, cuyo ejemplo se debatía y enseñaba en los cursos de directores deportivos … como el ciclista perfecto y en las clases teóricas de los modestos equipos de corredores, como el ciclista a imitar por su perfección, tesón y clase.
Los pequeños corredores, aprendían que Lance, el mejor ciclista de todos los tiempos, se imponía sobre sus contrarios, sobre todo atendiendo a tres máximas, sabiendo sufrir, con un trabajo bien hecho y con muchas ganas y ambición de ganar. Su figura eclipsaba a los alevines, infantiles, cadetes, juveniles, amateur y profesionales, tanto o mas que el ejemplo de su antecesor el navarro Miguel Indurain.
Pero los directores deportivos, también y a la par, enseñamos a los pequeños que se inician en este deporte, que ganar con trampa es perder. Por que no … es ético, por que … lesiona la integridad y objetivo del deporte y erosiona la credibilidad en la confianza personal y del grupo al que pertenecer. Enseñamos que el deporte, ante todo debe de ser limpio y que la superación ha de llegar de la mano del esfuerzo personal, utilizando otras alternativas sanas y naturales que ayuden ay permitan sin necesidad de recurrir a tomar sustancias prohibidas.
Enseñamos y recomendamos, que a largo plazo, siempre, la mejor alternativa al juego sucio, ha de ser … elegir un buen entrenador, entrenar y recuperar adecuadamente, acudir a una alimentación equilibrada y cuidar los aspectos psicológicos de la competición y del entrenamiento.
Por el contrario el dopaje, y la utilización de sustancias prohibidas, catapulta premeditadamente la obtención de resultados a corto plazo y obliga a terminar la carrera deportiva de forma totalmente prematura y de forma colateral ayuda a la caída irremediable del mito, a su derrumbe para siempre, por que no siempre se puede ser el mejor, ni siempre eternamente podemos estar rompiendo el primero con el pecho la cinta de llegada de meta. El éxito es efímero y viene envuelto en un envase con fecha de caducidad, y a esto también hay que aprender a acostumbrarse.
Por ello, los pequeños corredores, cuando adquieren facultades y proporciones de adultos, consiguen a través de un compromiso ético, personal y deportivo respetar el espíritu y las reglas de este deporte (tan castigado en los últimos años ) respetando a los rivales, pero sobre todo y la más importante respetándose a si mismos practicando un deporte limpio.