Autor: Rafael Espino Navarro
Hoy 20 de noviembre, hace justamente un año que el Partido Popular, ganaba las elecciones generales. Desde entonces, muchas cosas han pasado. Para peor, sin duda alguna.
Millones de personas votaron a la derecha más rancia de este país pensando que sus promesas de creación de empleo pronto se verían cumplidas- Esas personas hoy conocen otra realidad bien distinta. Y todos… todos hemos comprobado que con un voto no cambiamos casi nada.
Amparado en sus mentiras y en la nefasta gestión del Partido Socialista Obrero Español, con Zapatero al frente, el PP llegó al poder, prometiendo lo que luego no han sabido o no han querido cumplir.
Su promesa de crear tres millones de empleos quedo en agua de borraja y hoy las cifras de desempleo rondan los seis millones de personas , al igual que su compromiso de arreglar la maltrecha economía que he heredaba del PSOE, tal y como ya hicieron (todos pudimos verlo y ahora sufrirlo( en el año 1996, cuando en sus lujosos despachos planificaron la creación de la burbuja inmobiliaria, que hoy después de seis años todos padecemos , algunos lloran y hasta hay personas que mueren por causa de ella.
Nunca, es nuestra democracia un gobierno había engañado tanto y tan descaradamente a los ciudadanos de este país. A los que le votaron y a los que no. Prometieron con la boca grande arreglar la economía y con la boca pequeña susurrando exclamaban ¡ que se jodan¡.
Han hecho todo lo contrario a lo que prometían en su campaña electoral, porque ahora dicen ¡ no podemos hacer otra cosa¡. Prometieron no subir nunca el IVA y lo han subido. Prometieron que ellos no recortarían en sanidad y educación y les ha faltado tiempo para realizar drásticos recortes en los servicios más públicos y urgentes que un gobierno democrático debe de proporcionar a sus ciudadanos.
Su invento de co-pago y los recortes en educación nos están haciendo recordar otras épocas, donde solo los más pudientes económicamente podían acceder de la educación y la sanidad en este país.
En apenas algunos meses y con la urgencia de su reforma laboral han atacado los derechos laborales y sociales de todos los trabajadores de este país. Derechos legítimamente alcanzados por la lucha social y obrera durante los últimos cien años, que ellos han catapultado a la nada en solo algunos días. Beneficiando con ello solo a los empresarios al abaratar un despido que ellos rápidamente se han prestado en ejecutar.
Han subido la luz, el gasoil y los precios de los alimentos básicos. Han optado por dar el dinero público a la banca, mientras millones de personas sucumben a la indigencia y al hambre física sin tener nada que llevarse a la boca durante días.
El Partido Popular en solo este año ha hecho más daño a España y a los españoles, que el peor enemigo imaginado y la historia le recordara como el partido de las mentiras y las trampas. El partido de los engaños y los subterfugios. Es un gran valedor del arte de la mentira y la demagogia política. Nunca haría lo que dice que hacen los demás y sien embargo ha hecho todo lo contrario.
Después de un año de gobierno de Mariano Rajoy, el balance es desolador. Y las mentira y acciones del gobierno son la principal amenaza que se cierne hoy sobre España.
Durante todo este tiempo, un solo año, todos hemos aprendido algo. Hoy tenemos muchos mas claro y sabemos que con un voto no cambiamos casi nada y más cuando con ese voto se cambia y elige a un gobierno que ha convertido a España en «la cueva de Ali.Baba y los cuarenta ladrones» . Un gobierno que engaña, que para nada practica la transparencia y la sinceridad y que piensa más en sus intereses políticos y económicos que en los intereses de todos los españoles.
Ha comenzado un tiempo de descuento, una cuenta atrás que no sabemos donde nos llevará, pero sin duda alguna hoy lo el PP es participe de sus propias mentiras y engaños . Unas mentiras y engaños que algún día, no muy lejano le pasarán de nuevo factura electoral, al igual que ya se la pasaron en anteriores campañas electorales. Pero lo que hoy nos preocupa a muchos españoles es el daño irremediable e irremisible que puedan causar a esta país si persisten en seguir practicando la peor de las políticas posibles … la que se somete a los poderes e intereses financieros nacionales o extranjeros y a la gran patronal.
