
La noche de San Juan siempre ha estado rodeada de magia, ritos y misterio. Con la llegada del solsticio de verano el hemisferio norte enciende las hogueras, baila y pide por la fecundidad de las tierras y los hombres y para que el sol renueve su energía, justo cuando los días empiezan a menguar.


La Asociación Cultural Puerta del Agua de Aguilar que desde hace años viene salvaguardando tanto el patrimonio material como el intangible, celebró el pasado jueves esta centenaria tradición con diversos actos en una de las casas más bellas: la de Antonio Benavides y Conchi Arcos. Abrió el acto el vicerrector y catedrático de la UCO, José Naranjo, que analizó de forma didáctica las circunstancias astronómicas que dan origen a las estaciones, los solsticios y los equinoccios, además de las creencias y visiones mágicas que han tenido al respecto las diferentes civilizaciones que han poblado la Tierra. A continuación intervino Francisco Cabezas, uno de los fundadores de la asociación, que habló sobre “Los misterios de San Juan. Cuentos, números y geometría”. De forma original hizo un análisis de la historia de Aguilar, relacionando fechas, números metálicos y proporciones, poniendo de relieve la existencia de una simbología masónica en algunos de los edificios más significativos. Demostró, de manera gráfica, que los edificios construidos a finales del siglo XV (Castillo y parroquia del Soterraño) guardan la proporción áurea y que en los edificados a partir del XVI, como la iglesia de la Candelaria y el camarín de Jesús Nazareno, encontramos el denominado número de plata (octógono). También analizó en su exposición las relaciones de ubicación y tamaño que guardan la Torre del Reloj y la plaza de San José. La parte musical corrió a cargo de los músicos José Galisteo, Miguel Arjona y José García. Al final de la velada Antonio Jiménez y Diego Pérez rindieron un homenaje al poeta Vicente Núñez proyectando un audiovisual en el que se hacía un recorrido por su biografía, su obra y su correspondencia con otros poetas como Luis Cernuda. Teresa Romero fue la encargada de presentar los diferentes actos de la noche que concluyeron con la degustación de las fantasías culinarias aportadas por los presentes y de una queimada que puso el broche de oro a esta noche mágica.
José Sierra Lebrón.