Los vecinos denuncian el peligro para los mayores al no tener vallas de protección
JESÚS PRIETO / AGUILAR
Día 03/09/2011 – 09.45h
Los vecinos de la avenida de Córdoba, antigua travesía de la carretera N-331 a su paso por Aguilar, no están de acuerdo con la utilización de una glorieta como lugar para el descanso de las personas mayores. Y es que el proyecto de mejora de esta importante vía urbana ha contemplado la colocación de bancos de madera en el centro de una nueva glorieta construida en la confluencia de las calles Camino Ancho, Casas Viejas y Paseo García Lorca.
El vecindario critica que el lugar no es seguro para ubicar hasta nueve bancos en un espacio muy reducido y rodeados por el intenso tráfico que se acumula en una de las principales entradas a la población desde la autovía A-45. Incluso plantean la duda de si las normas de seguridad vial permiten el uso de las glorietas como lugar de esparcimiento, «ya que no existe ninguna valla de protección y cualquier vehículo puede meterse en un despiste dentro», indican.
Asimismo, consideran que en estos espacios circulares que bordea el tráfico lo normal es que estén inutilizados para el tránsito de personas y sólo se usen para zonas verdes o la instalación de fuentes. En este sentido, mantienen que «los pasos de peatones se sitúan siempre en los accesos a las glorietas y no dentro de ellas porque ocasiona muchas confusiones entre los vehículos y los peatones».
Pasos elevados
Se da la circunstancia de que en el proyecto de obra que se está ejecutando desde julio de 2010 se han levantado un total de seis glorietas a lo largo del trazado y sólo ésta del Barrio Bajo se ha habilitado además como paseo. Las demás no permiten la entrada de peatones, que deben cruzar por las calles de acceso a las glorietas.
Ésta es una de las últimas críticas que los vecinos están dirigiendo contra el proyecto de obra que se financia con cargo al Ministerio de Fomento y que tiene un presupuesto de 2,6 millones de euros. No son pocas las quejas de numerosos conductores por la elevada cantidad de pasos de peatones elevados que en algunos casos han dañado los bajos de algunos vehículos. En aproximadamente un kilómetro hay hasta diez de estos pasos elevados, algunos a tan sólo cincuenta metros unos de otros.
Esta obra se ejecuta dentro de los programas previstos para adecuar las antiguas travesías de carreteras nacionales que dejan de tener ese uso y pasan a integrarse dentro de los cascos urbanos como avenidas. Los trabajos llevan desarrollándose desde hace catorce meses y comenzaron por diversos avatares con más de tres años de retraso.
El proyecto contempla, entre otros, la construcción de canalizaciones subterráneas de alcantarillado, nueva iluminación, acerados, aparcamientos y un carril bici.
La zona en la que se sitúa la polémica glorieta donde se han ubicado los bancos fue una de las más afectadas por la tormenta que azotó la población en agosto de 2010. Precisamente, el proyecto ha habido que complementarlo para introducir una conducción de grandes dimensiones que discurre por debajo de la calzada para evitar avalanchas de agua como las acaecidas entonces.