Si algo caracteriza a la procesión de la mañana del Viernes Santo en Aguilar son las largas hileras de devotos que acompañan al Nazareno durante todo el recorrido alumbrando con cera. Testimonio de este hecho son las instantáneas que se tomaban por los fotógrafos profesionales de la localidad y que después se exponían para su venta. En la que mostramos, fechada en década de los Setenta, aparecen personas de distintas edades: hombres, mujeres. y niños. En primer término, Manuel Martín Lucena, que sería posteriormente hermano mayor de la cofradía entre 1998-2001.