Como todos los años, el festival de folclore congregó a un numeroso público que llenó el Llano de la Cruz para disfrutar del espectáculo que ofrecen los grupos que acuden a la cita anual con el folclore en Aguilar invitados por el grupo Al-Andaluz.
En una noche de finales de julio en la que la temperatura fue bastante benigna, el eco de la música y coplas tradicionales invadieron el espacio y el tiempo y trazó los bailes populares que deleitaron al público, y llenaron de colorido y alegría la noche.
Logroño y Aragón (Teruel) se unieron con sus sones a los fandangos, tanguillos, alegrías de Cádiz, farrucas o sevillanas, que cantaron e interpretaron el grupo local. Dulzaina y tamboril, castañuelas y pandero, fueron la base en las interpretaciones de las jotas y bailes de grupo que ejecutaron los grupos visitantes, y que animaron e hicieron disfrutar de la noche al público que los aplaudió largamente.
Cerca de tres horas duró el espectáculo que se ha convertido ya en un clásico del verano aguilarense en las vísperas de la Feria Real. Una edición más el Festival de Folclore de Aguilar ha tenido el nivel y altura artística requerida para que el público siga respaldando y apoyando esta actividad cultural.
