Una nueva cita con el folclore en el verano aguilarense llenó de público el recinto del Llano de la Cruz en una noche apacible, climatológicamente hablando, y muy calurosa y bulliciosa en el ambiente que rodeaba a los numerosos componentes de los tres grupos que participaron con sus bailes y cantes en el festival.
Se cumplía este año la XXIII edición, y ha estado dedicado al poeta Vicente Núñez, al que se le ha rendido así un sentido homenaje desde el mundo del folclore popular. Los aires de Galicia invadieron el Llano de la Cruz con los tamboriles, panderos y gaitas del Grupo de Danzas Castillo Do Rey (Palacio Do Rey, Lugo), quienes mostraron un amplio repertorio de cantes y bailes de la tierra gallega. Ataviados con sus trajes típicos, los componentes del Coro y Danzas Tierra de Barros (Almendralejo, Badajoz), dejaron también una buena muestra del folclore extremeño, especialmente del de la zona central de la provincia de Badajoz.
El Llano de la Cruz vibró un año más con estos grupos folclóricos foráneos que muestran la diversidad y riqueza de la cultura popular en las distintas zonas o regiones de España, y que a la vez contrastan con los de Andalucía, cuya interpretación corre cada año por cuenta del grupo de música y baile de la Asociación Cultural Al-Andalus. Todos los grupos alcanzaron un gran nivel interpretativo en sus pases, llenando de colorido y alegría la noche del sábado.