Hemos quedado como el culo sería la expresión en la jerga actual para detallar la última que ha liado la alcaldía de Aguilar. Para quienes creían que no eran capaces de superarse a sí mismos, pues lo han hecho, (y lo que te rondaré morena porque van a salir cosas más gordas). Ya es voz populi, aquí y en Verneuil, que los socialistas del ayuntamiento de Aguilar no tienen enmienda ni fabricándolos nuevos.
A 20 días de viajar el Comité de Hermanamiento de Aguilar hasta la ciudad hermana de Francia para conmemorar el 20 Aniversario del Hermanamiento de ambas ciudades, con un proyecto que se viene programando desde octubre del 2017, ha sido tal la dejadez y la falta de previsión del ayuntamiento de Aguilar que los representantes del Comité de Verneuil se han visto forzados a suspender todos los actos en su ciudad ante la desidia e incapacidades que han encontrado en nuestras autoridades.
Nuestra alcaldía no había hecho ninguno de los deberes que tenía encomendados para programar con garantías esta actividad, empezando por prever el coste real que iba a tener y haberlo contemplado con una partida en los Presupuestos del 2018. La cantidad que habían consignado era de 2.000 euros, que obviamente no da ni para ir a Verneuil en furgoneta.
Me imagino que después de este desatino, uno más de la alcaldía, los amigos franceses habrán pensado: “Quién nos mandaría a nosotros hermanarnos con esta gente”. Por suerte ellos han conocido a otros concejales y a otra alcaldesa que supieron dejar a este pueblo al nivel que merece y no al que lo rebajan los socialistas con estas pifias.