El Ayuntamiento de Aguilar se ha adherido, como viene siendo habitual en otras actuaciones de la Dirección General de Tráfico (DGT) a la campaña de vigilancia y control sobre distracciones al volante. Durante la próxima semana, los agentes de la Policía Local, prestarán especial atención a las distracciones al volante, que son una de las principales causas de los accidentes de tráfico. La distracción al volante aparece como una de las principales causas de los accidentes mortales durante el pasado año.
En este aspecto la sensibilización ciudadana se considera que es primordial. Las operaciones de vigilancia y control se desarrollarán desde el lunes 16 de septiembre hasta el domingo 22, ambos inclusive, y con ello se pretende seguir avanzando en la educación vial y reforzando la seguridad en la carretera, reduciendo al mínimo posible el número de accidentes provocados por cualquier tipo de distracción.
Durante esos días, los agentes locales harán especial hincapié en la realización de controles de forma aleatoria en distintos puntos del municipio. La Policía Local recuerda que marcar un número de teléfono móvil, responder a una llamada telefónica, leer o contestar a un ‘Whatsapp’, manipular el navegador o utilizar las redes sociales, supone apartar la vista de la carretera durante un tiempo, periodo en el que el vehículo circula sin control y pueden surgir circunstancias que provoquen un grave accidente.
Desde la DGT se ha indicado que la peligrosidad por un uso inadecuado del móvil puede llegar a ser equiparable a la conducción con exceso de alcohol. Un conductor que habla mientras conduce pierde la capacidad de mantener una velocidad constante, no guarda la distancia de seguridad suficiente con el vehículo que circula delante y el tiempo de reacción aumenta considerablemente, en concreto entre medio a dos segundos, dependiendo de los reflejos de cada conductor.
El sueño y la fatiga son dos causas importantes de siniestralidad vial, muy presentes en aquellos accidentes que se producen por colisiones por alcance, salidas de la vía o invasiones de carril contrario. Conducir con sueño o fatiga implica un aumento del número de distracciones al volante, la alteración de la capacidad para tomar decisiones, el aumento del tiempo de reacción ante los eventos del tráfico y la disminución de la capacidad para prestar la atención debida entorno.