En vísperas de la Festividad Inmaculista que se celebra en la jornada de mañana, 8 de diciembre, y organizada por la concejalía de Turismo, se ha desarrollado a lo largo de la tarde de hoy una ruta por distintos lugares de nuestro pueblo que preservan la huella de esta ancestral devoción religiosa.
Desde la parroquia del Soterraño, donde se inició recorrido a las 5 de la tarde, hasta el Salón de Plenos del Ayuntamiento, donde ha concluido a las 20,30., el nutrido grupo de personas que han participado en el evento han podido conocer con detalle toda la historia y el patrimonio que se ha originado en nuestro pueblo en torno a este fervor mariano de gran prevalencia en el tiempo.
El patrimonio mueble, el documental, el artístico y el devocional se ha visto impregnado a lo largo de los siglos por la defensa del Misterio Inmaculista y su posterior proclamación dogmática, y Aguilar conserva un valiosísimo patrimonio escultórico, pictórico, monumental, etc, derivado de este credo, que merece ser conocido y puesto en valor.
Con ese fin se ha programado esta actividad. Una ruta guiada que ha contado con el mejor guía que podía tener, José Galisteo Martínez. Nadie como él conoce la temática concepcionista en Aguilar, además de atesorar una sobresaliente formación académica que se vislumbra en el rico glosario con que diserta sobre la materia.
Todo el grupo de asistentes ha quedo sorprendido por el valioso patrimonio que acaudala nuestro pueblo con respecto a esta tradición cultural, además de por el derroche de datos y conocimientos que nos ha trasferido Pepe Galisteo en una clase magistral itinerante, ya que, además de los templos, hemos recorrido las calles céntricas del pueblo donde quedan testigos de la devoción a una doctrina de origen apostólico que fue proclamada dogma por el Papa Pío IX el 8 de diciembre de 1854 con la bula Ineffabilis Deus.
No podía faltar en este recorrido la visita a la iglesia de las Carmelitas donde se conserva un valiosísimo patrimonio generado por la devoción que la Orden del Carmen ha profesado desde tiempo inmemorial a este Misterio. Parada en el camino que nos ha endulzado aun más la noche, ya que hemos podido degustar los ricos dulces que elaboran las monjas del convento.