Esta mirada retrospectiva al tiempo vivido nos remonta a los años treinta del pasado siglo XX, permitiéndonos contemplar en una imagen cómo era la caseta montada por dos entidades socioculturales del pueblo “La Cultura” y “La Amistad” para la celebración de la Feria Real. Se ubicaba en el antiguo solar de la Iglesia del convento de las Clarisas, templo que fue derruido en las primeras décadas del citado siglo.
En esa época el Paseo de las Coronadas se convertía en una continuación del Real que se ubicaba en el Paseo de la Membrilla, por lo que acogía algunas de las actividades que se programaban para los días de feria que, desde 1912, acontecía en el mes de agosto.