El domingo 31 de octubreel Club de Atletismo “Amo Allá” retomó, tras el paréntesis por la covid-19, su tradicional gala que este año sumaba la VIII Edición. Con un formato más reducido y dinámico, pero igualmente atractivo y centelleante, que gozó del aplauso generalizado de todos los asistentes, 82 adultos y 24 niños compartieron un tiempo de exaltación del atletismo y de los valores a él asociados: esfuerzo, pundonor, sacrificio, dedicación, camaradería… Los socios y familiares estuvieron acompañados por la alcaldesa Carmen Flores y el concejal de Deportes Juan Delgado.
A lo largo delacelebración, conducidos esta vez por la maestría al micrófono de Marcelo Romero e Isabel Araque, que ejercieron de maestros de ceremonias, se entregaron varios premios que recompensaron la trayectoria atlética de algunos componentes del club durante estos últimos y difíciles tiempos. Sería muy prolijo enumerarlos por lo que solo recogeremos dos. El primero de ellos, el de corredora del año, fue recibido por Fátima Ouhaddou quien, con un palmarés inconmensurable, ha sobresalido con numerosos puestos de honor en diversas competiciones a lo largo y ancho de la geografía española. Por señalar solo uno, el más reciente, su triunfo en la Carrera Popular “Ciudad de Aguilar” celebrada esa misma mañana.
El segundo galardón, y seguramente el más emotivo de la noche, fue el Premio de Honor que en esta ocasión recayó por unanimidad de los componentes de la Junta Directiva en José Antonio Maestre Yago. Tal y como se subrayó por parte de Marcelo Romero, se tuvieron en cuenta para otorgar tal distinción su impecable trayectoria y dedicación altruista, sus innumerables cualidades humanas y su actitud ante la adversidad. El anuncio de la misma fue acompañado por una larga ovación que trascendió el espacio físico del salón para entrar directamente en el corazón de todos los presentes. El homenajeado, en un breve discurso, agradeció la entrega recordando sus ya lejanos inicios en la práctica del atletismo y significando que “Amo Allá” es verdaderamente más que un club. Por último, dedicó de forma muy sentida el premio a su mujer Puri Muñoz.
En un ambiente agradable –pero guardando las debidas medidas de seguridad-, acompañados por un suculento menú servido en “Los jardines de La Casona”, las conversaciones giraron inevitablemente en torno a las proezas y las anécdotas atléticas de los corredores, pero también sobre mil y un temas que fueron desgranándose al calor de un ambiente familiar y de camaradería. Y, como viene siendo habitual, se procedió al sorteo de diversos regalos a los asistentes. Asimismo, se destinó un espacio de esparcimiento para los más pequeños.
Un año más la Junta Directiva del Club de Atletismo, presidida por Agustín Romero Bonilla, se ha superado, consolidando una iniciativa que, más allá de la pasión que comparten sus miembros, ha reforzado los lazos de unión y amistad entre todos ellos, al tiempo que ha marcado en el horizonte la nueva cita con este bello deporte en Aguilar de la Frontera: la San Silvestre Solidaria.