
La Agrupación de Cofradías celebró en la noche de ayer, 5 de marzo, el vía crucis oficial por las calles de Aguilar, como cada primer viernes de cuaresma, aunque la edición de este año ha tenido un carácter extraordinario con motivo de haberse recuperado esta celebración penitencial tras la interrupción impuesta por la pandemia.
Continuando con la costumbre de que sea la imagen que protagoniza el cartel de Semana Santa quien presida el vía crucis, en este 2022 ha sido Jesús Cautivo, titular de la Hermandad de la Caridad, quien ha recorrido las calles escoltado por las cruces de guía de todas las cofradías, que han ido marcando, en el largo recorrido que separa la iglesia de las carmelitas con la del Beato Nicolás, los lugares donde se han rezado las 14 estaciones rememorando los momentos de la Pasión.
Un acto solemne con el que la institución cofrade inaugura cada año el tiempo penitencial que prepara a los cristianos para la celebración de la pasión, muerte y resurrección de Cristo y que se viene organizando en las últimas décadas de manera ininterrumpida, aunque sus antecedentes se remontan a años anteriores.
La recoleta iglesia de San José y San Roque constituye desde hace algunos años la catedral que acoge el inicio de este acto penitencial, y es el punto de partida de la procesión de regreso de la imagen que lo preside hasta su sede canónica. Para la Hermandad de la Caridad, estos momentos han sido de especial significación, ya que fue la comunidad carmelita quien acogió la llegada de la imagen del Señor Cautivo a nuestro pueblo a mediados del mes de diciembre de 1999, manteniéndose en la clausura del convento hasta el día 20 de diciembre, fecha en la que se bendijo en la parroquia del Soterraño.
Tras la misa y el rezo de la primera estación en el “Llanito de las Descalzas”, se llevó a cabo el regreso al barrio del Cerro Crespo en una procesión cuyo acompañamiento de fieles fue muy numerosa en la primera parte del recorrido, viviéndose una noche apoteósica de emoción cofrade en la que una vez más se demostró el arraigo devocional que ha adquirido la imagen de Nuestro Padre Jesús del Silencio Cautivo desde su llegada a Aguilar, hecho histórico del que se cumplirá pronto los 25 años.
Tras la finalización del Vía Crucis tuvo lugar un sencillo acto de bendición de la nueva saya y manto que lucirá la Virgen de la Concepcion el próximo Lunes Santo, se trata de un diseño de Don Antonio Villar, vestidor oficial de la imagen, inspirado en los antiguos colores que lucían las Inmaculadas de Murillo en sus primeros cuadros.




