Las tormentas eléctricas que se han desarrollado en los últimos días no han dejado lluvia resaltable, pero sí episodios de fuerte viento que han provocado varias incidencias en la tarde de ayer. Las pocas gotas que cayeron dejaron imágenes sorprendentes, como la de algunas palomas intentando saciar la sed en un tejado de chapa del Mercadona. En Aguilar de la Frontera han caído 2,8 litros.
Más protagonismo ha adquirido el viento que sopló en la tarde del sábado con rachas fuertes que hicieron que se desprendiesen algunas ramas de árboles, tanto en el jardín del Cuartel de la Guardia Civil como en la Piscina Municipal. Por suerte, no afectó ni a personas ni a vehículos.
A partir de este domingo, los cielos permanecerán despejados en el conjunto de la provincia y las temperaturas iniciarán un ligero descenso hasta el miércoles, cuando se esperan 33 grados de máxima en Córdoba capital.
