Antonio Zurera: El adalid de la política fiscal del PP

No es por casualidad que los partidos de la Oposición de nuestro pueblo anden montando circos en los Plenos Municipales a cuenta de un debate abierto sobre las rebajas fiscales y bajadas de impuestos, en la línea de lo que está haciendo el PP en muchas comunidades autónomas que se han sumado a la carrera y al populismo fiscal por ver quien baja más los impuestos a los que más tienen, pensando únicamente en sus fines electoralistas sin tener en cuenta el coste que estas medidas suponen para el resto de la población.

Más aún en estos momentos tan complicados que estamos atravesando. Tras una pandemia que paralizó la actividad económica y social, y que, por fin, cuando parecía que levantábamos cabeza, gracias entre otras, a las medidas sociales y de apoyo económico a la población y a los sectores más perjudicados, puestas en marcha por el gobierno, por las diputaciones y por los ayuntamientos, como decía, cuando empezábamos a ver el final del túnel, llega la guerra en Ucrania y el encarecimiento de los precios de los alimentos básicos y de la energía.

En Aguilar ese debate se ha centrado sobre bajar el IBI y, no crean que ha sido el PP quien ha demandado tal bajada, no, una vez más, ha sido Antonio Zurera quien ha guiado la cruzada defendiendo las políticas de derechas, a la que se han sumado obviamente el PP y APD, como era de esperar, y un PSOE local desnortado que navega a la deriva y es incapaz de defender en el pueblo el mismo posicionamiento político que tiene su partido a nivel nacional.

Los que más pagan de IBI son los que más inmuebles tienen y los que más riquezas acumulan, por lo tanto, bajar el IBI sería una medida que beneficiaría sobre todo a los que más tienen, lo que resulta incompresible es que haya partidos, que digan ser de izquierdas, y tengan estos postulados. Esto solo se entendería, claro, bajo el contexto de que nos encontramos a escasos meses de unas elecciones municipales y que detrás de estas propuestas solo hay fines electoralistas y postureo político.

Es muy fácil proponer bajadas de impuestos y pedir políticas de apoyo al empleo, a los comercios, a los sectores de la población más vulnerables y a la par pedir que se bajen los impuestos que permiten realizar estas políticas. Desde luego son cosas opuestas.

IU no está en contra de bajar los impuestos siempre que la rebaja fiscal beneficie a la mayor parte de la población. Lo que IU desde luego no apoya es bajar los impuestos para favorecer a los que más tienen en perjuicio del resto de la población y del estado del bienestar y de la prestación de servicios públicos. Y como ejemplo el impuesto de vehículos. Ese no lo menciona Antonio Zurera. Aguilar es uno de los pueblos de la provincia en los que menor es el impuesto de circulación, y fue a propuesta de IU, en un contexto muy diferente al actual, cuando existía el techo de gasto, cuando el ayuntamiento recibía ingresos que no era capaz de gastar y acababan en una cuenta de un banco, pagando intereses, fue entonces cuando IU propuso bajar este impuesto, que paga cualquier vecino o vecina que  sea titular de un ciclomotor, una furgoneta, un tractor, un camión un remolque, es decir, no estamos hablando de élites, ni de los que más tienen, sino de jóvenes, estudiantes, agricultores, comerciantes, camioneros, feriantes, etc., se beneficiasen de esta rebaja.

Ya lo dice el refrán “Por las políticas que defienden los conoceréis” y Antonio Zurera defiende como nadie las políticas de la derecha más reaccionaria de este país, como a él le gusta decir.

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