
Un performance sobre Bernarda Alba creado por el polifacético Antonio Cabello Reyes, natural de Aguilar de la Frontera (Córdoba) pero asentado desde hace tantos años en Los Palacios y Villafranca, profesor de Literatura, actor y director de obras teatrales y pintor, ha inaugurado una atractiva exposición de retratos y motivos naturales en el Molino del Duque, organizada por la asociación Galatea.
20 cuadros diversos cuelgan desde ayer en las paredes de la sala de exposiciones del histórico edificio y pueden contemplarse durante la próxima semana. 20 invenciones muy coloridas, un pequeño recorrido por dos de sus obsesiones, el retrato y la naturaleza, un colorido vivo que entronca con las vanguardias de comienzo del siglo XX; una descomposición que recuerda a la experimentación cubista, al colorido del Fauvismo y hasta a la provocación del Dadaísmo.
Sus retratos hablan desde el color, desde la descomposición en planos de la realidad y desde el collage que transgrede, mezclando el recorte con el acrílico, la témpera con el papel de periódico. Retratos que son literatura en concepto y en forma, el concepto velazqueño en sus meninas, el lorquiano en una hija de Bernarda Alba o el cervantino en el retrato de Alonso Quijano.
