Decíamos en un artículo de opinión, publicado el pasado 12 de mayo, que Aguilar no es un pueblo cualquiera de la provincia para la política municipal; y hoy podemos verificarlo tras lo ocurrido en la jornada electoral de ayer domingo. Este pueblo ha vuelto a hacer historia respaldando, por segunda vez consecutiva, una mayoría absoluta de diez concejales, hecho que supuso un hito histórico que se logró en 2019 tras los 44 años transcurridos desde abril de 1979, cuando se celebraron las primeras elecciones municipales democráticas tras la dictadura.
Como vaticinamos en aquel artículo, la victoria de Izquierda Unida era voz populi y solo se cuestionaba el alcance que tendría la misma, dudándose si se revalidaría la mayoría absoluta o no. El pueblo ha reconocido el trabajo hecho, y a punto han estado los de la calle Mercaderes de batir su propio récor y alcanzar 11 concejales.
Decíamos también que en el círculo de los populares se sentían optimistas porque esperaban un impulso extra por los vientos favorables del PP a nivel andaluz y nacional, y han sido agraciados con 400 votos más que les ha permitido sumar otro concejal, por lo que serán dos los ediles de la derecha en el Ayuntamiento.
Batacazo estrepitoso ha sido el resultado del experimento orquestado por la secretaria general del PSOE de Aguilar, Ester Ruiz, poniendo de candidato a Mateo Urbano en la lista socialista. El PSOE ha sacado 186 votos menos que en el 2019 y se han disipado los 574 que consiguió Mateo como aspirante de APD. No cabe otra lectura que un rotundo fracaso, cuyas consecuencias pueden ser imprevisibles para esta organización, pues la situación interna generada es de debacle política.
Conservar los dos concejales que logró UPOA en las pasadas elecciones era el mínimo que confiaba alcanzar esta organización política tras el insólito cambio de candidato (padre-hijo) que se producía tras treinta años de ser postulante a la alcaldía Antonio Zurera Cañadillas. Y aunque al final UPOA ha sacado 84 votos más que en el 2013, pasa a ser la cuarta fuerza política del hemiciclo municipal con solo dos ediles.
Como advertí en el artículo referido, todos los candidatos y candidaturas han salido a ganar las elecciones, faltaría más, y ha sido el pueblo soberano quien ha situado a cada uno en el lugar que le corresponde. Esa es la realidad que nos ha dejado la noche del escrutinio. El pueblo ha hablado y este ha sido su veredicto.