La pisa de uva es dicho de forma muy somera, hacer vino con los pies. Esta labor tradicional existe desde que el hombre produce vino. Está documentada en civilizaciones antiguas como Egipto, Grecia y Roma. Encontramos representaciones iconográficas de la pisa de uva en mosaicos, frescos y pinturas en todas estas civilizaciones.
Hasta el siglo XX pisar uvas fue el método más extendido para la transformación del fruto en vino. En la actualidad, existen bodegas que han rescatado este método para producir algunas de sus referencias y otorgar un valor añadido a estos vinos que rescatan el saber ancestral.
Pisar uvas se ofrece hoy como atractivo enoturístico en muchas bodegas para que los visitantes experimenten la labor en primera persona. Pero, nada más lejos de la realidad que sobrellevaron los jornaleros que realizaban este duro trabajo para poder ganar un salario que apenas les daba para sobrevivir.
Jornadas interminables de muchas horas en la pisa y en unas condiciones extremas de calor lo convertía en un trabajo casi inhumano. Testimonio de ese esfuerzo desmedido que realizaban nuestros padres y abuelos ofrece en esta bella instantánea fechada a mediados del pasado siglo XX.
Foto cedida por Angela Calero.
