
El Centro Filarmónico Aguilarense vivió una de sus etapas más fructíferas en la década de los años ochenta y noventa del pasado siglo, cuando un nutrido grupo de personas se vincularon a la entidad convirtiéndola en un referente para la gran tradición musical de nuestra localidad.
En esos años fue reconocida su calidad en muchos lugares de nuestra comarca y provincia donde ofrecieron conciertos cosechando importantes éxitos.
La labor del Centro Filarmónico no ha estado sólo supeditada a la difusión de la música por puro entretenimiento, sino que sus aspiraciones era fomentar la enseñanza de la misma, para crear así una conciencia musical que indudablemente ha contribuido a elevar el nivel cultural de nuestra sociedad local.
La aportación del Centro Filarmónico como difusor del legado cultural de Aguilar no ha cesado, pero, qué duda cabe, que los tiempos a los que nos remite esta histórica fotografía, y las personas que en ella aparecen, fueron de los más gloriosos de su historia.