La calurosa jornada de ayer sábado hizo mella en los romeros que realizaron el camino de ida hasta el Santuario de la Virgen en la Fuente de Don Marcelo. La larga comitiva de carrozas y los cientos de personas que acompañaron a la carreta de la Virgen sintieron la intensidad del calor que fue creciendo a medida que avanzaba la mañana.
A las 12 del mediodía se rezó el ángelus en el monolito del arroyo de la Compañía, y a partir de ahí se aceleró la marcha para llegar al Santuario lo más pronto posible, y sobre las 2 de la tarde la Virgen ya estaba en la ermita. A esas horas, la tórrida temperatura obligó a refugiarse a los romeros en sus casas de hermandad y muchas de las personas que realizaron al camino volvieron al pueblo en el servicio de autobús.
El calor era sofocante a las 5 de la tarde cuando hizo su entrada la hermandad filial de Montilla, y así se mantuvo hasta el oscurecer en que comenzó a bajar la temperatura dando un respiro a todos. Llegada la noche, se animó el real y la romería vivió los momentos más intensos de celebración y convivencia.
Cerca de la ermita, cantes, bailes y comida animaban las casas de hermandad y el recinto que comenzó a llenarse de visitantes, entre ellos, las autoridades comandadas por la alcaldesa, Carmen Flores, que asistieron a la recepción que ofrece la cofradía matriz.
Las altas temperaturas anunciadas para hoy domingo marcarán también el ambiente de los actos de esta jornada, que tiene en la Misa de Romeros su momento estelar. Ya por la tarde se iniciará el camino de vuelta, estando previsto que la Virgen llegue al Llanete Manuel López sobre las 22.00 horas.
