En 1924 el Marqués de Casas-Vargas cometió el error cierto de colocar en la casa nº 13 de la calle Arrabal, entonces denominada Antonio Toro Valdelomar, unas cadenas que simbolizaban el privilegio concedido por el rey Carlos III a Manuel Gutiérrez de Salamanca, consistente en el derecho de asilo en su vivienda para los perseguidos por la justicia.
La confusión del Marqués de Casas-Vargas fue creer que la casa que habitaron los Gutiérrez de Salamanca era la nº 13, cuando realmente fue la nº 11. A pesar de haberse constatado el fallo este se ha mantenido en el tiempo, de tal forma que aun hoy se pueden contemplar las cadenas colgando en la fachada de la casa nº 13.
Esta antigua fotografía nos muestra la belleza arquitectónica del palacete del linaje de los Dávila, heredado por el Marqués de Casas-Vargas, antes de que este personaje cometiese el desliz histórico, elementos que han hecho que se le conozca popularmente como Casa de las Cadenas. Por lo tanto la foto se tomó antes del año 1924.