
Si eres un devorador de momentos y no te importa sacrificar minutos de sueño, cazar amaneceres es tu destino. Los mejores de Aguilar de la Frontera se divisan desde el Castillo cuando el astro rey rebasa la línea fronteriza entre el cielo y la tierra que marca el horizonte de la sierra Subbética.
Son esos instantes que te dejan sin habla durante unos segundos, pero que lo dicen todo cuando estamos frente a ellos, están a tu alcance. Para contemplarlos te tocará despertar temprano, subir al recinto fortificado, pero uno sólo de ellos puede cambiarte la vida. Disfruta de esa dulce condena que es vivir los primeros destellos del día.