
De los años ochenta recuperamos esta vieja instantánea de una de las carrozas que participaban en el multitudinario pasacalle de la mañana del Domingo de Carnaval. Años difíciles, pues la tradición se volvía a reponer tras las décadas en las que la dictadura franquista persiguió y castigó con cárcel a quienes se atrevían a desafiar con sus coplillas o máscaras a la autoridad.
Fueron los carnavales memorables de los ochenta en los que la gran participación de los colectivos hicieron posible la recuperación de la fiesta, entre ellos, los Centros Educativos de Primaria y Secundaria, así como el Centro de Adultos, que sacó ese año una carroza con la Reina del Carnaval y sus Damas de Honor.