
Uno de los pilares más antiguos de la Semana Santa de Aguilar y de la cofradía nazarena en particular es el de la presencia de soldados romanos acompañando e interactuando con las cinco imágenes que antiguamente procesionaba esta hermandad penitencial.
La escolta romana se caracterizaba por los colores que hacían amalgama en sus desfiles del Jueves Santo para la Visita a los Sagrarios y en la mañana del Viernes Santo.
En sus apariciones ante el público general los humildes romanos conmovían en cada toque de trompeta y tambor y el paso marcial de sus componentes. En 1968 eran un grupo reducido de romanos los que mantenían la tradición, y en esta bonita captura fotográfica aparecen algunos de ellos subiendo la Cuesta de Jesús en la recogida de la cofradía al mediodía del Viernes Santo.