Gran solemnidad y emotividad revistió el histórico acto que aconteció en la tarde de ayer, viernes 8 de junio, en el Salón de Plenos del Ayuntamiento, que acogió la Sesión Municipal Extraordinaria, que fue presidida por los restos mortales del último alcalde republicano de Aguilar. José María León Jiménez.
A las 8 en punto de la tarde llegaba a la Plaza de San José el féretro escoltado por la Policía Municipal, siendo recibido a la puerta del Ayuntamiento por toda la Corporación, procediendo inmediatamente el alcalde a la colocar sobre el mismo, la bandera de Aguilar, el bastón de mando y medalla corporativa, como símbolos del cargo que ostentaba esta persona cuando fue sacado del Ayuntamiento, en agosto de 1936, para ser fusilado en el Cementerio Municipal.
Tras ser depositado el féretro en un catafalco dispuesto en el Salón de Plenos, tomaron posesión de sus asientos los Miembros de la Corporación, iniciándose la Sesión con la lectura de la convocatoria por parte del secretario, sometiéndose a votación los dos puntos del Orden del Día: la incoación del expediente para el nombramiento de Miembros Honorarios de la Corporación al alcalde y cuatro concejales fusilados tras el Golpe de Estado del 1936, y el nombramiento de juez instructor al portavoz del grupo de IU, Antonio Maestre Ballesteros, y de secretario del expediente, al Cronista y Archivero de la ciudad, Diego Igeño Luque. Los dos puntos fueron aprobados por unanimidad.
A continuación el alcalde dio lectura a una moción institucional en la que se mostraba el sentir de la Corporación por los luctuosos y desgraciados hechos que motivaron el fusilamiento del alcalde José María León Jiménez, y los concejales, Antonio Cabello Almeda, Antonio García Márquez, Rafael Aparicio de Arcos, y Andrés Alberca Conde, miembros de la Corporación Municipal que fue destituida por la fuerza militar en Julio de 1936. Resaltó el alcalde en sus palabras la legitimidad democrática que asistía a estas personas, representantes efectivos del pueblo, y el ultraje que supuso su destitución forzosa e inmolación personal. Dijo que con este acto se reponía una página de la historia de Aguilar que había sido silenciada y ocultada a las actuales generaciones.
Concluido el Pleno, los restos del alcalde José María León fueron acompañados y despedidos por la Corporación Municipal y las numerosas personas que asistieron al acto en la puerta de la Casa Consistorial, siendo trasladados nuevamente al Cementerio Municipal, donde se custodiarán hasta la mañana de hoy, sábado 9 de junio, en los que serán entregados, junto a los demás represaliados, exhumados por Aremehisa, a sus familiares.